viernes, 6 de diciembre de 2013

Cruzar la frontera y evolucionar

Tomo este título del 1° capítulo de Viajes con Herodoto (Ryszard Kapuscinski); "Cruzar la frontera"; pero ¿qué significa ello?... Se puede cruzar la frontera de distintas maneras: mentalmente, físicamente o integralmente. Pienso que cada quien sigue con su propia evolución, y cada quién transita por la frontera como quiere o como puede.

Para que una persona madure, requiere evolucionar, lo cual implica un proceso -largo- de tiempo. No obstante, ¿qué sucede cuando el proceso se rompe?... la gente no madura y se queda en lo mismo; sin embargo, también es cierto que se requiere una buena dosis de cotidianidad para crecer y evolucionar. Bien dice el refrán: "la práctica hace al maestro". Por lo tanto, la rutina es al hombre; lo que es el tiempo a los buenos vinos; mientras más añejos, mejor (tant mieux).

Sin embargo, lo importante de esta reflexión es "Cruzar la frontera". Herodoto cruzó la frontera del Mar Egeo y se convirtió en Padre de la Historia. Kapuscinski cruzó la frontera polaca; y además de convertirse en corresponsal, llegó a ser uno de los mejores escritores de viajes en los tiempos modernos. ¿Qué fronteras quedan por cruzar? Viajar por Grecia, Medio Oriente, América Latina; entre otros rincones del mundo... ¿y cuál otra?, buscar la autorrealización de cada quién, tomando en cuenta sus medios y posibilidades.


México D.F., 5 de diciembre de 2013.

11:10 A.M.